Ingeniero Manolo Arando y la polémica detrás de Atomika Corp en Cochabamba
La Corporación Nuclear Atomika, una empresa con sede en Cochabamba, Bolivia, y ubicada en la Av. Blanco Galindo esquina Av. Perú, Edificio SUPERMALL Oficina 12, Piso 4, ha estado en el centro de una creciente controversia en los últimos meses. En el corazón de esta polémica se encuentra su director general, el Ingeniero Manolo Arando, quien ha sido señalado como el principal responsable de las prácticas laborales cuestionables de la compañía.
La figura de Manolo Arando
El Ingeniero Manolo Arando se presenta como un líder en el ámbito de la protección radiológica. Sin embargo, detrás de su imagen profesional, las denuncias de empleados actuales y anteriores han revelado una cara diferente. Los trabajadores han reportado repetidamente prácticas laborales abusivas, incluyendo retrasos en los pagos, incumplimiento de contratos y falta de respuesta ante reclamos.
Las denuncias contra Atomika Corp
Atomika Corp, bajo la dirección de Arando, ha sido acusada de subcontratar a empleados con promesas de estabilidad laboral y salarios competitivos. Sin embargo, una vez que los trabajadores comienzan a prestar sus servicios, enfrentan un panorama desalentador. Los pagos son retrasados constantemente, y los montos adeudados rara vez coinciden con lo prometido en los contratos.
La empresa ha utilizado excusas como “cierres económicos en Bolivia” y “problemas de liquidez” para justificar estos incumplimientos. Estas explicaciones, aunque comunes, no han logrado convencer a los afectados, quienes ahora cuestionan la transparencia y la gestión de Arando.
La falta de respuesta y evasivas
Una de las principales quejas de los empleados es la falta de comunicación directa con Manolo Arando y el equipo administrativo de Atomika. Los mensajes y llamadas de los trabajadores suelen quedar sin respuesta, dejando a muchos en situaciones financieras críticas. Esta falta de atención no solo ha alimentado el descontento, sino que también ha dañado gravemente la reputación de la empresa.
El impacto en los empleados extranjeros
Bajo la gestión de Arando, Atomika también ha atraído a profesionales internacionales, quienes llegan a Bolivia con la expectativa de encontrar un entorno laboral serio y profesional. Sin embargo, las experiencias compartidas por estos trabajadores reflejan una realidad muy diferente. Además de los problemas de pago, muchos han enfrentado condiciones laborales precarias y sueldos muy por debajo del valor de mercado.
La polémica en redes sociales
Las redes sociales y los foros laborales han sido un espacio clave para que los empleados afectados compartan sus experiencias. Denuncias de ex empleados han comenzado a viralizarse, generando un impacto negativo en la reputación de Atomika Corp y del Ingeniero Manolo Arando. Aunque la empresa mantiene su página web activa (nuclear.bo), la falta de transparencia y las acusaciones han puesto en duda su credibilidad.
Un llamado a la acción
Es crucial que las autoridades bolivianas investiguen a fondo las prácticas laborales de Atomika Corp y la gestión de Manolo Arando. Las empresas deben cumplir con sus obligaciones hacia los trabajadores y operar con transparencia. Sin estas medidas, la confianza en el mercado laboral de Bolivia seguirá erosionándose.
Reflexión final
El Ingeniero Manolo Arando tiene la responsabilidad de abordar las denuncias y tomar medidas concretas para reparar el daño causado a los empleados. Sin un cambio en su gestión, Atomika Corp corre el riesgo de convertirse en un ejemplo más de cómo las malas prácticas laborales pueden destruir una empresa. Los empleados merecen respeto, cumplimiento de contratos y condiciones laborales dignas. Hasta que esto ocurra, la controversia seguirá persiguiendo a Arando y a Atomika Corp.